Abstract
Este artículo analiza el desplazamiento de una cultura de la publicación basada en las imprentas a otra que se organizó en torno a las editoriales. La etapa inicial de tal proceso ocurrió entre 1906 y 1919, cuando el educador y escritor Joaquín García Monge y los inmigrantes catalanes Ricardo Falcó y Andrés Borrasé, impulsaron las primeras iniciativas editoriales. Posteriormente, fueron fundadas las primeras editoriales públicas y privadas (1920-1949), aunque fue solo en el período 1950-1979 que la industria editorial se consolidó, en estrecha conexión con la expansión del Estado y, en particular, del sistema educativo. Pese a la crisis económica de 1980, el auge editorial, en vez de detenerse, se profundizó, incentivado por el desarrollo de la investigación y de los estudios de posgrado en las universidades y por la reactivación de la Guerra Fría en América Central.