Abstract
A fin del siglo XX, en Argentina, los procesos de reforma del Estado con la descentralización de competencias a provincias y municipios en áreas vinculadas a la salud, la educación y la vivienda, trajo consigo el problema de que la descentralización de las competencias no fue correspondida con el traslado de recursos. Hoy, se suman otros reclamos en los espacios locales relacionados con el acceso al suelo urbano y la vivienda digna, la sustentabilidad ambiental, la equidad de género, la disminución de la brecha digital entre otras. La falta de planificación de políticas integrales de hábitat para pobladores de menores ingresos, desposeídos, migrantes, empleados en servicios en las familias consolidadas o en la ciudad, profundiza la desigualdad social y la degradación ambiental en la ciudad. Este trabajo propone el análisis de las nuevas dinámicas de acceso al suelo de manera legal implementadas desde el Estado en Pehuajó, Argentina y, para ello hace foco en el estudio crítico del uso de instrumentos normativos en relación a la incorporación de la tierra privada como políticas de inclusión de la población de bajo recursos de barrios populares. La propuesta se articula como interpretación afiliada con el discurso del Programa para América Latina y el Caribe del Instituto Lincoln de Políticas del Suelo. Desde una óptica autodefinida como progresista aplica nuevos instrumentos a la gestión del suelo urbano con la función de prevenir la informalidad y tener así una ciudad más inclusiva, mejor financiada, distribuir más equitativamente los servicios públicos y las cargas, y elegir las geotecnologías más apropiadas.