Abstract
El presente escrito tiene como objetivo aproximarse a lo que ha sido la gran “fisura” de los “Principios de la filosofía del derecho”: el aumento ingente de pobreza en el seno de las sociedades industriales modernas. A partir de su filosofía gris, carente de soluciones, Hegel aporta una filosofía política cuya estructura lógica y coherencia no escapa del latido de la negatividad que ostenta todo acontecer histórico, dando cuenta de las contradicciones de los mismos elementos que vertebran aquella realidad tal y como es. En este sentido, la pobreza no será vista ya como mero daño colateral de la abundancia o como una intrusión externa dentro de la sociedad civil y enfrentada al Estado, sino como el fundamento del mismo orden existente. La lectura de Hegel conducirá a aproximarse a las propias “fisuras” de la realidad y, muy especialmente, a los límites de la racionalidad moderna, cuyo nivel de abstracción y desapego de la realidad parece generar un incontenible amontonamiento de residuos imposibles de recoger por la misma.