La Casa de Suecia como ejercicio de contención en la ciudad

Abstract
Entre 1953 y 1956, Mariano Garrigues construye en Madrid la Casa de Suecia. La forma exterior del edificio atiende a dos cuestiones urbanas: por un lado, resuelve la diferencia de escala existente entre el Círculo de Bellas Artes y el tejido histórico, por otro, ofrece una imagen unitaria ante la va­riedad de usos albergados en su interior. Se propone explicar esta fachada desde una afinidad nórdica: la que habría surgido en Garrigues, tras un viaje realizado al país escandinavo, en 1949. El estudio se lleva cabo en tres etapas: monumentalidad, equilibrio y acentos. Las fuentes primarias –los primeros alzados y las fotografías del edificio en construcción o recién construido– se complementan con ejemplos seleccionados de la arquitec­tura nórdica. Finalmente, las conclusiones avanzan hacia una comprensión de esta obra como un ejercicio de contención en la ciudad.